El proyecto Fuels-C está desarrollando biocombustibles de próxima generación a partir de residuos orgánicos y CO₂, con el objetivo de reducir la dependencia de los combustibles fósiles y fortalecer la seguridad energética de Europa de aquí a 2050.
La transición energética de Europa requiere soluciones disruptivas para reducir la dependencia de los combustibles fósiles y avanzar decididamente hacia la neutralidad climática de aquí a 2050. En este marco, el proyecto Fuels-C, financiado en el marco del programa Horizonte Europa, está desarrollando una plataforma integrada de tecnologías innovadoras para convertir residuos orgánicos y CO₂ biogénico en biocombustibles avanzados altamente eficientes que puedan utilizarse directamente en el transporte.
Afrontar el desafío de descarbonizar el transporte
Los sectores del transporte, como el transporte marítimo y el transporte pesado por carretera, siguen dependiendo en gran medida de los combustibles fósiles. Los biocombustibles avanzados ofrecen un medio fiable para reducir las emisiones y reforzar la seguridad energética de Europa. Sin embargo, aún es necesario abordar desafíos técnicos y económicos para que la producción de biocombustibles escalable, competitiva y sostenible se convierta en una realidad.
Fuels-C tiene como objetivo abordar este desafío produciendo cuatro biocombustibles avanzados (biometano, amoníaco, etanol y ácido fórmico) a partir de desechos orgánicos y flujos de CO₂ de bajo costo. El proyecto establecerá una ruta de conversión eficiente que utiliza energía renovable para aprovechar al máximo el carbono orgánico, proporcionando un combustible verdaderamente sostenible que puede usarse en celdas de combustible para aplicaciones de transporte, tanto marítimo como por carretera.
La innovación consta de cinco pilares
El proyecto consta de cinco pilares principales, que combinan excelencia científica y relevancia industrial.
Pilar 1 – Materias primas e insumos: Creación de una herramienta de mapeo basada en SIG para evaluar la disponibilidad de residuos biogénicos, el potencial de energía renovable y la logística para un despliegue eficiente en toda Europa. Pilar II – Combustibles para el transporte por carretera: Desarrollo de rutas innovadoras de conversión termoquímica, electroquímica y bioelectroquímica para producir etanol y ácido fórmico a partir de flujos de residuos complejos y CO₂. Pilar III – Combustibles para el Transporte Marítimo: Avances en la producción de biometano y amoniaco utilizando una combinación de digestión anaeróbica y diversas técnicas bioelectroquímicas como ruta de conversión para lograr una mayor eficiencia y un menor consumo energético. Pilar IV: Validación de pilas de combustible: probar directamente los cuatro biocombustibles en pilas de combustible de óxido sólido y líquido directo para medir la densidad de potencia, la eficiencia energética y la estabilidad operativa. Pilar 5 – Digitalización y Sostenibilidad: Creación de modelos avanzados de la tecnología de producción de cada combustible y gemelos digitales del proceso de conversión integrado, permitiendo evaluaciones tecnoeconómicas y ambientales y apoyando la replicación en múltiples regiones europeas.
Resultados esperados e impacto
A través de este enfoque integrado, Fuels-C ofrece:
Incrementar la eficiencia de las tecnologías de conversión de biocombustibles y trasladar nuevas soluciones a la validación TRL 5. Desarrollar soluciones repetibles y escalables que conecten las materias primas locales con las necesidades regionales de combustible. Proporciona evaluaciones tecnoeconómicas y de ciclo de vida sólidas para acelerar la preparación y el despliegue en el mercado. Demuestra reducciones significativas en las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con los motores convencionales.
A largo plazo, Fuels-C fortalecerá el liderazgo de Europa en innovación de biocombustibles, reducirá la dependencia de las importaciones de fósiles y abrirá nuevas oportunidades de mercado para las industrias europeas de energía y transporte.
Un consorcio europeo fuerte
Fuels-C reúne a 11 socios de siete países europeos, combinando la experiencia de institutos de investigación, universidades, pymes innovadoras y actores de la industria. El consorcio, coordinado por el Centro Tecnológico Leitat (España), está acumulando conocimiento de vanguardia sobre procesos termoquímicos, electroquímicos y bioelectroquímicos, junto con modelización avanzada, evaluaciones de sostenibilidad y estrategias de explotación.
Con una colaboración multidisciplinar y una visión ambiciosa, Fuels-C se posiciona como una iniciativa clave para acelerar la transición energética de Europa, introduciendo biocombustibles avanzados como una solución competitiva y sostenible para el futuro del transporte.
Este artículo también se publicará en el número 24 de la revista trimestral.
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